Hoy después de dos años he decidido cambiar mis caminos de pensamiento.
Vengo de mi cita con el doctor, fuí sola y estoy orgullosa de mí.
No puedo ocultar que en verdad esperaba que él llegara...como si fuera una película romántica en donde a pesar de los problemas y de las circunstancias el hombre llega sin importar nada, y acompaña a la mujer en situaciones difíciles que nada tienen que ver con el amor romántico que se profesan, sino con el deseo de recuperación de salud de una persona importante en su vida. Pd: Nunca llegó.
Esperé poco más de una hora en la sala de espera, y al entrar al consultorio, era yo sola con mis miedos comunes, con mi temblor de piernas... esto es a causa de que cada vez que visito el doctor me dan noticias nada gratas, se sobreentiende mi alboroto cuando tengo cita médica, pero era yo sola y punto, no había un brazo del cual agarrarme, no hubo ninguna mano que sostuviera la mía, no hubo ningún par de ojos a los que acudiera de vez en cuanto a solicitar consuelo.
Los resultados fueron satisfactorios, y salí del consultorio triunfal.
Al salir por la puerta me dije a mi misma en voz alta y clara.
"Eres una mujer fuerte, auto suficiente, no dependes de nadie para hacer tus cosas, no dependes ni dependerás de ningún hombre, y mucho menos de él..."
Me subí al carro y me dirigí hacia la oficina (pedí permiso anteriormente para ir a mi cita) y en el trayecto se me revelaron varias cosas.
1.- Mostré un poco de debilidad al llamarle y decirle "pensé que vendrías", tonta de mí!...
2.- Eso hizo que me sintiera mal por unos minutos.
3.- A lo que me llevó a pensar que... si en verdad estoy dispuesta a cambiar para mi propio bien, es necesario empezar a cambiar de pensamiento.
4.- "Pensar al revés" es lo que le digo a mi amiga. Y eso haré.
La teoría de "Pensar al revés" consiste en hacer que cada pensamiento que llegue a mi mente no logre instalarse como llegó, sino que lo haré cambiar, le daré la vuelta y así se anidará de una forma diferente.
Empezaré hoy mismo.
Hoy es un día importante, lo llevo planeando durante un par de meses.
Soy una mujer que disfruta demasiado ir a fiestas elegantes, amo todo el proceso; la selección del vestido, la elección e invitación de mi acompañante, ir a peinarme, maquillarme etc. Todo esto con el fin de verme bonita, no soy muy partidaria de usar maquillaje cargado diariamente, jamás uso tacones, por eso me gusta tanto ir a esas fiestas, mis fiestas elegantes se resumen a una o dos por año, me disfrazo de una mujer bella y poderosa, confiada en si misma.
Pero qué ha pasado últimamente? Desastres!!!!
Pasa que dejo caer sobre mi acompañante la mayoría del "éxito" de mi noche. PRIMER ERROR.
Pero ya no cometeré eso, ahora mi acompañante sera solo un TESTIGO de mi felicidad y no un MEDIO para lograrla.
Au revoir.
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