viernes, 24 de abril de 2009

MAGA

y de golpe, sin saber cómo, se había oído hablándole a Talita como si fuera la Maga, sabiendo que no era pero hablándole de la rayuela, del miedo en el pasillo, del agujero tentador. Entonces (y Talita estaba ahí, a cuatro metros, a sus espaldas, esperando) eso era como un fin, la apelación a la piedad ajena, el reingreso en la familia humana, la esponja cayendo con un chasquido repugnante en el centro del ring. Sentía como si se estuviera yendo de sí mismo, abandonándose para echarse -hijo (de puta) pródigo- en los brazos de la fácil reconciliación, y de ahí la vuelta todavía más fácil al mundo, a la vida posible, al tiempo de sus años, a la razón que guía las acciones de los argentinos buenos y del bicho humano en general. Estaba...
-Vos... -dijo Oliveira mirándola colérico, y se interrumpió para abrir la cerveza con un golpe de la mano contra el borde de una silla. Estaba viendo con tanta claridad un boulevard bajo la lluvia, pero en vez de ir llevando a alguien del brazo, hablándole con lástima, era a él que lo llevaban, compasivamente le habían dado el brazo y le hablaban para que estuviera contento, le tenían tanta lástima que era positivamente una delicia. El pasado se invertía, cambiaba de signo, al final iba a resultar que La Piedad no estaba liquidando. Esa mujer jugadora de rayuela le tenía lástima, era tan claro que quemaba.
sangre en las venas
te digo y me decís
y nuestro pulso, cruel detractor de barbaries
que no conocimos, perpetuo carnaval que se nos
aparece junto a los ojos...

felina, la mujer-pez se acerca y me acaricia, me mima
con sus palabras escritas en un viento cambiante, que
acompañó la mutación del mar, el cambio de estaciones
sagrado...

y saber que cada vez falta menos, que nuestra época
todavía no ha comenzado
, y que inventaremos historias
hermosas con finales tristes en alguna habitación
vacía, que nos tendrá como únicos habitantes

y treparemos a las paredes
y dejaré que me mates
para matarte luego yo

y quizás nos encontremos una noche de lluvia,
y contemplaremos, seremos los testigos de esto que
no me animo a definir como historia,
libro o mandala,
nuestra hermosa y maldita carcel kármica que supimos
conseguir...


no le hagás caso a mi voz...vos sos la
verdadera voz, la palabra, el designio
...yo soy el
dibujo, la imagen vista desde lejos, ese que se te
acercará, te devolverá tu corazón de cristal después
de tanto tiempo, y te abrazará, te besará y te
invitará a nadar contra la corriente a su lado para
siempre...

el milagro de los colores
tu pelo, mitad
hermosa cara para ser dibujada
voy a desterrarte infinitamente de tu cárcel,
vos no estás hecha para seguir formando parte de
colecciones, de listas aleatorias y humanas...


somos culpables de la eternidad, Maga...la
palabra maldita te encierra, a mi también...vos sos la
Maga que me encontró, yo soy el Leandro que un Mayo te
quiso dibujar...

estamos rompiendo las leyes de la identidad
convencional, estamos destrozando las imaginarias
barreras de espacio y tiempo, nunca creimos en las
distancias ni en los mares premonitores
...aunque se
que aún existe un miedo...se que la entrega tendrá que
ser absoluta, o no servirá para nada que hayamos
engañado a los relojes...

perfecta musa para este pintor de muñecos desnudos
cuando nos veamos de nuevo detendremos los
relojes, y permaneceremos eternamente en ese primer
día, nuestro libro nunca dejará de comenzar, nos
sorprenderá con las metáforas de las que formaremos
parte...la penúltima canción continuará sonando...

vamos a enterrar a nuestros yo equívocos
quiero equivocarme de nuevas maneras a tu lado


poeta maldita,
dama asesina,
princesa vampira,

mujer, mujer-pez,

ojos de gata,

Maga,

mi error más hermoso
o mi hermosura más errónea...


preparemos las alas, mitad...


vas a ver que los peces pueden volar...
sé que lo sabés, Maga...se nota en tus naturalidades, en la forma de caminar, en la manera de alzar la vista irónicamente, la mayoría confunde ese gesto con ingenuidad, yo lo entiendo, yo soy la Maga, la no-Maga, la coraza, el cigarrillo en lugar de la metáfora, el deseo de dejar de existir, el deseo de empezar a existir...
-Che, te estás poniendo metafísico y viejo, L.-sonrió entre dientes, luego de decir por segunda vez esa oración, en apariencia inocente y hasta jocoso, pero sabiendo (o sin saber) que era eso... que era verdad...
La Maga (lo había observado en los últimos días) tenía el puñal clavado de una manera mucho más visible de lo que había pensado en un principio...seguramente el calor que había comenzado, había dejado al descubierto las heridas...viéndolo desde afuera no parecía tan grave, pero sabía -lo intuía en sus transformaciones a no-Maga- el dolor era gigante...perfecta representación de la palabra.

Suenas a realidad, a tridimensional, a viable, a olor de multitud, a fiesta, a vida ciudadana, a humedad de noche en la playa, a un apretado fin de semana, a hoguera, humo y ruido, a amistad que dura y es fecunda, a cobijo de la intemperie, a valses y canciones, a canciones de madre, a jotas, danzas y fandanguillos, a vino y guitarra, a amores sosegados, a locuras poéticas, a licencias de sensatez, a morbo y masoquismo, a incomprensión compartida, a paredes húmedas con olor a amor, a saliva amarilla, a fruta olorosa, a mar mediterráneo, a bosque urbano, a celos y pasiones, a largos paseos de noche, a ilusiones y sueños de adolescente.


¿?




Si llegas a leer este post, te pido de favor me aclares unas cuantas cosas...

esto llega a mis ojos,
no se si sentirme engañada o alagada,
querías encontrarla,
la Maga, María,
todos los nombres se vuelven el mismo nombre despues de... cuanto era?



te pido me aclares unas cuantas cosas...

MUERTA LA MAGA...


Au revoir.

LG



2 comentarios:

Refachadona dijo...

De los mejores Post con que nos has deleitado. Como no mas no se me da el escribir, hace unos días justamente, he estado pensando mucho en la Maga, recuerdo haber puesto en el facebook (imagínate, que chaqueto) Maga, no mas, así.... porque la traigo presente, porque a veces creo encontrarme a Horacio por ahí. Saludos!

Lluvia Gabriel dijo...

El primer nombre con el que me registre a facebook fué Edith Arón...

patético...

saludos